EMBARAZO

El embarazo es una de las experiencias más intensas que puede vivir una mujer a lo largo de su vida. Es una etapa de constantes cambios en los que la mujer se enfrenta a muchas fluctuaciones en su estado emocional; las emociones están a flor de piel y los contrastes entre ellas están muy acentuados.

La mujer se siente feliz y llena de amor pero al mismo tiempo el miedo está presente a lo largo de todo el embarazo; miedo a que el bebé tenga algún problema, miedo a los resultados de las pruebas, miedo al parto, miedo a no ser una buena madre...al  mismo tiempo aparecen sentimientos de tristeza, ya que en muchas ocasiones no reciben el afecto que necesitan y el cansancio físico aumenta cada día más con lo que todas estas emociones se experimentan con más intensidad.

La musicoterapia aporta a la embarazada la posibilidad de expresar todas estas emociones, de darles salida y encuentra un lugar en el que se siente comprendida, dándole recursos con los que enfrentarse a las situaciones de una más natural y beneficiosa para ella.

El trabajo musicoterapéutico se realiza utilizando la música como medio para llegar a las emociones. La embarazada lelga a experimentar sus sensaciones de una manera natural consiguiéndolo a través de la expresión corporal, el trabajo con la voz, la respiración, el baile y la relajación, siempre con el soporte de la música.

La terapia musical humanista facilita recursos con los cuales afrontar el momento del parto con menos ansiedad. Así mismo trabaja la relación madre-hijo desde el afecto, la madre experimentará sensaciones que transmitirá a su hijo y todo ello fortalecerá los lazos afectivos entre los dos.

A través de la voz la madre se comunica con su hijo. Para el bebé la voz de su madre es fundamentel, es importante lo que dice pero lo es más cómo lo dice, la emoción que transmite con ella, el tono de voz, el timbre, el volumen y si a todo ello le añadimos una buena respiración tenemos un instrumento muy eficaz a la hora de comunicarse con el bebé. No se trata de cantar bien o mal, lo importante es que la voz de la madre esté  cargada de contenido emocional, que sea expresiva y que la vibración que se genera en todo el cuerpo aporta seguridad al bebé.

La musicoterapia también se aplica después del parto. En muchas ocasiones las mujeres sufren de estados depresivos, en los que se sienten cansandas, desbordadas, incomprendidas y a la vez felices por tener a su hijo ya con ellas. En estos casos la musicoterapia facilita a la mujer un lugar donde dar salida nuevamente a estas emociones contradictorias pero que a la vez son naturales y le aporta una manera de vivirlas de una manera más saludable para ella y para su bebé.

Os dejo este interesante artículo sobre el efecto de la música en el embarazo.

https://www.naturalrevista.com/percepcion-musical-durante-la-etapa-prenatal/