ALZHÉIMER
La enfermedad de Alzheimer es una patología neurodegenerativa cerebral, progresiva e irreversible. Afecta de forma difusa a las neuronas de la corteza cerebral y otras estructuras adyacentes, y lleva a una degeneración de la función cognitiva y a trastornos conductuales.
Se caracteriza por un deterioro de la capacidad del sujeto para controlar sus emociones, desenvolverse en su entorno de acuerdo a unas pautas de conducta normales, y coordinar adecuadamente sus movimientos y memoria, entre otros trastornos.
Se trata de la forma más común de demencia (supone el 60% de todos los casos de demencia), y afecta a cerca de 36 millones de personas en todo el mundo. La prevalencia alcanza al menos el 30% de la población que supera los 85 años. Siendo mujeres cerca del 70 por ciento de los afectados de entre 65 y 90 años.
PRIMEROS SÍNTOMAS DEL ALZHÉIMER
Memoria y concentración
- Cambio de lugar o pérdida de objetos importantes.
- Confusión acerca de cómo llevar a cabo tareas cotidianas.
- Dificultad para resolver problemas aritméticos sencillos.
- Dificultad para tomar decisiones rutinarias.
- Confusión acerca del mes o la estación del año.
- Dificultad para realizar dibujos (test del reloj), construcciones en tres dimensiones, o para orientarse en espacios abiertos. El paciente pierde paulatinamente la capacidad para reconocer objetos, personas o lugares.
Humor y conducta
- Cambios de humor impredecibles.
- Progresiva pérdida de interés por el entorno, o por sus gustos o aficiones.
- Depresión, angustia o confusión en respuesta a los cambios.
- Negación de los síntomas.
- Puede presentar irritabilidad, agresividad, agitación y desinhibición social.
SÍNTOMAS TARDÍOS DEL ALZHÉIMER
Lenguaje y discurso
- Dificultad para completar frases o encontrar las palabras adecuadas.
- Incapacidad para entender el significado de las palabras.
- Conversación reducida o irrelevante.
Movimientos y coordinación
- Movimientos y coordinación marcadamente deteriorados, incluyendo lentitud de movimientos, marcha renqueante y sentido del equilibrio disminuido.
CÓMO TRABAJAMOS EN MUSICOTERAPIA HUMANISTA
Nos basamos en la corriente humanista, que cree en el desarrollo del potencial del ser humano, proporcionando un ambiente de comprensión empática en el que el paciente sienta que no se le juzga, que se le acepta y que puede expresar todo lo que es, dentro de un marco de congruencia por parte del terapeuta. En este sentido, es importante dejarse llevar, entendiendo que no siempre es necesario que pase algo. Todo lo que pasa en la sesión está bien.
Trabajamos con las emociones y el alma de la persona siguiendo la clasificación de las emociones básicas, que se agrupan en lo que se ha denominado MATEA (Miedo, Alegría, Tristeza, Enfado y Amor). Estas emociones tienen una funcionalidad y no se consideran buenas o malas, son energía, sólo que a veces no las dejamos que fluyan ni las aceptamos y pueden llegar a tener relación con enfermedades. Vamos a aprender a que esas emociones puedan fluir.
Es una terapia no directiva, donde el terapeuta actúa como facilitador. No se aconseja, no se cambia nada, sino que se acompaña. Esto implica situar al paciente y al terapeuta en un plano de igualdad, partiendo de la idea de que todos somos seres humanos. Es la persona quien va a trabajar las emociones, quien toma decisiones y decide los límites. Es una terapia con estructura abierta, centrada en la necesidad de la persona.
Como herramienta se utiliza la música, que sirve de reflejo de lo que se siente. Ésta es vivida a nivel corporal o motor, cognitivo y sensitivo o emocional:
- A nivel corporal se trabaja con la localización de emociones a través de sensaciones obtenidas en el cuerpo, proporcionando herramientas para darles salida.
- A nivel cognitivo, se utiliza la palabra para llegar al tema o motivo de consulta de la persona y para expresar y ordenar lo vivido en la sesión; también se utiliza la voz como forma de expresión de emociones.
- A nivel emocional se potencia el lado del corazón, intentando salirnos de lo racional y otorgando más espacio a lo que se siente. Esta dualidad ha habitado el ser humano durante mucho tiempo, dando importancia a lo cognitivo y dejando lo emocional a un lado. Trabajar el lado emocional ofrece la posibilidad de mostrarnos cambiantes, de ofrecer otras imágenes diferentes de nosotr@s mism@s a las que nos hemos acostumbrado, sin ser rígidos, flexibles. De esta forma estamos permitiéndonos vivir cosas que tal vez no puedan llegar a explicarse y la persona pasa a considerarse un proceso, más que un producto acabado.
La música no se trabaja desde un punto de vista estético, ya que ésta no se considera fea o bonita, agradable o desagradable, sino un medio de expresión de lo que hay dentro de cada persona. A su vez, lo que ocurre no es causado por la música al 100%. Si la música mueve nuestra emoción es porque esa emoción está dentro de nosotros. Es un trabajo de escucha y toma de conciencia de un@ mism@.
El momento es aquí y ahora. Es una terapia del presente. Si se quiere trabajar el pasado, se hace trayendo este momento anterior al momento actual.
Se trabaja con la audición musical, la voz, los instrumentos, el cuerpo y el espacio. A veces se utilizan medios auxiliares de expresión, como la pintura y la dramatización.
Objetivo general
Proporcionar un espacio terapéutico a través de la musicoterapia donde trabajar las emociones y el deterioro de la memoria.
Objetivos específicos
1.- Favorecer un clima de aceptación que facilite el contacto y la expresión de las emociones.
2.- Utilizar la música para trabajar la pérdida de memoria.
3.- Trabajar la socialización en los enfermos de Alzheimer a través de la música.
Os dejo enlaces sobre musicoterapia y Alzheimer
https://www.youtube.com/watch?v=sPuz1b3UhmE
https://www.youtube.com/watch?v=SeSeRpGLZo8
https://www.youtube.com/watch?v=izn_ct24XSg
https://www.youtube.com/watch?v=PZE3KD4vSX4